ALHAURIN EL GRANDE EN EL REINO DE GRANADA
Restos de muros de la Alquería Fadala
Alhaurin el Grande a partir del
siglo IX se va convirtiendo, en el transcurso de los años en una inexpugnable
fortaleza, imposible de tomar con las armas de esa época, protegida de ataque
por mar, difícil tomarla por tierra. La fortaleza se encontraba defendida al Sur
por la Sierra de Mijas, y los castillos de Mijas y Fuengirola; al Norte los
castillos de Cartama, Alora, Antequera, Casarabonela, Alozaina; por el Este la
Alcazaba y castillo de Málaga; por el Oeste los castillos Marbella , Gaucín Ronda; ese es el motivo de
certificar lo difícil y duro de tomar “El Lugá de los Bereberes” los bereberes eran hombres de paz mayoritariamente agricultores, otras
profesiones como : canteros, carpinteros, herreros vaqueros, cabreros,
ovejeros, amantes del caballo, Alhaurin se convierte por su abundancia de agua
y buena tierra para la siembra con tres alquerías “la alquería de los
Bereberes, la alquería de Fadala y la alquería de la Torre de Jurique” en el
mercado de abasto de las fortalezas y castillos antes mencionado, es a partir
del S.XV cuando estas fortalezas y castillos empiezan a temer lo peor la
epidemia de peste negra, que empezando en Almería rápidamente se extiende por
todo el Reino de Granada, y caer en manos cristianas; (no existe documento que
acredite que sus Majestades los Reyes Católicos estuviesen en Alhaurin). Es el
Marqués de Cádiz, Juan Pérez Ponce de León y Ayala (1432-1492), I marqués de
Cádiz y II conde de Arcos al frente de
un ejército profesional, hombre de
confianza de sus Majestades, el que empieza sus incursiones por el Valle del
Guadalhorce el azote es constante a las fortalezas y castillos del Reino Nazarí;
los cristianos empiezan a tomar los castillos de nuestra zona a partir de los
años 80 del siglo XV. Dando comienzo a un abandono de nuestras alquerías, por
temor a represalias de los cristianos, marchándose a zonas que todavía estaban
en manos del Reino Nazarí o al norte de África... Según Richard Ford en su
“Manual para viajeros por Andalucía” en la pg. 78, viene a decir que 1564 Hofnagel
el grabador holandés de la “Civitates Orbis Terrarun” comento que los
españoles, al expulsar a estos moriscos admirables agricultores, han convertido
un edén en un desierto. Es Juan Pérez II conde de Arcos, y primer Marqués de
Cádiz, él que se instala en el Alhaurinejo en la huerta la “torre” “de ahí nace
el nombre de la Torre de Alhaurinejo”; traducido debería llamarse la Torre de
Alhaurin; algunos historiadores sin justificación alguna equivocan a los
estudiosos en lo que viene a decir: que Alhaurin el Grande le pusieron Grande
para distinguir de Alhaurin de la Torre.
Un dato curioso y no real, es que no en todos los pueblos algunos
cronistas nos hablan de fortalezas que confundían con alquerías, algunas poseían torres vigías para visualizar los
caminos transitables y comunicar a otras alquerías si viniese el enemigo; los
castillos los árabes lo construían en zonas estratégicamente situadas bien en
zonas de frontera, bien en zonas abruptas altas a escasos miles de metros de
ríos o playas, buenas vistas, aljibe
para aprovechar las aguas de lluvias en caso de cerco y sótanos donde albergar
alimentos no menos de un año, sin descartar las caballerizas y las mazmorras
para los prisioneros: Texto de Cristóbal González Ramírez, prohibida su
reproducción total o parcial. 7 de Mayo 2.013.
En la batalla se conoce al soldado; en la victoria al Caballero